Datos del Municipio
Datos de Interés
- Cormarca: Montaña Oriental
- Población: 681 habitantes (datos INE a 1/1/2019)
- Altitud: 1144 m
- Superficie: 171,40 km2
Situación
Capital: Puebla de Lillo
Latitud: 43º 0' 23" N
Longitud: 5º 16' 33" O
Distancias:
47 km a Cistierna
70 km a León
187 km a Valladolid
374 km a Madrid
1468 km a Bruselas
El municipio de Puebla de Lillo limita al norte con la Cordillera Cantábrica y más concretamente con la parte occidental de los Picos de Europa. Esta delimitación geográfica ha elevado en los últimos años el valor estratégico de Puebla de Lillo, como municipio de referencia obligada en el sector del deporte de la nieve tanto a nivel provincial, como en la Comunidad de Castilla y León y, cada vez más, a nivel internacional, ya que los aficionados portugueses se han convertido en uno de los colectivos que acuden con mayor frecuencia y número a las pistas de esquí en la vertiente leonesa-astur.
Al sur, Puebla de Lillo limita con el pantano del Porma, otro de los recursos que ha multiplicado el potencial de los medios naturales y medioambientales del municipio. El agua se ha convertido en un bien escaso y, por ende, estratégico. El pantano, que se aprovecha para el regadío, está esperando una explotación de sus recursos a nivel turístico, sobre todo ante la creciente demanda de los visitantes asturianos, que se han convertido en los primeros demandantes de ocio en todo Puebla de Lillo.
Al este, Puebla de Lillo limita con el valle de Riosol, con el que se comunica por los puertos de Las Señales y de Tarna. Acceder al puerto de Las Señales representa una de las mejores experiencias medioambientales de toda la provincia, ya que es necesario atravesar uno de los mayores bosques de pinos autóctonos de Europa, en el que se cobijan algunos de los últimos grupos de urogallos de la península, quizás las aves en mayor peligro de extinción en toda España.
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La fauna de toda esta zona está protegida bajo la denominación de la Reserva Nacional de Caza de Mampodre, donde habitan rebecos, venados, corzos, jabalíes, cabras y lobos. Se supone que aún queda algún ejemplar de oso en la zona, aunque su continuidad es más que problemática. La difícil convivencia de estas especies ha sido alterada lo justo por la mano del hombre, sobre todo desde que se creó la Reserva Nacional de Caza.
Al oeste, las tierras de Puebla de Lillo lindan con la Montaña Central y con el valle del río hermano del Bernesga.
La muy mejorada carretera entre La Robla-Boñary Puebla de Lillo ha facilitado la comunicación y las relaciones entre dos zonas montañosas que se complementan y se necesitan.
Las 16.400 hectáreas que integran el término municipal de Puebla de Lillo son en su mayor parte zona montañosa. Los valles se reservan para la ubicación de los seis pueblos del Ayuntamiento y para la concentración de la escasa agricultura, una actividad en declive. Por el contrario, en estas vertientes montañosas resurge en estos años la actividad ganadera, tanto a partir de unas rejuvenecidas y modernizadas explotaciones familiares, como por parte de importantes empresas que han sabido cerrar el círculo de la explotación y generar valor añadido en la comarca a través de una emergente industria agroganadera, que transforma y comercializa los productos derivados del ganado vacuno.
Más allá de la zona de pastos, el bosque se señorea de las montañas. Robles, hayas y pinares coronan de verde gran parte del perfil montañoso que engloba en un semicírculo a Puebla de Lillo.
Pero, sin duda, Puebla de Lillo se ha convertido en este inicio del siglo XXI en una auténtica potencia turística y de servicios de ocio. La Estación de Esquí de San Isidro y la creciente demanda por parte de un turismo de calidad de recursos naturales bien conservados, ha provocado una creciente inversión en hoteles, restaurantes, bares, cafeterías, comercios, casas rurales, cámpings, etcétera.
Estas inversiones están modificando sustancialmente el modo de vida del municipio, cuya población tiende a concentrarse y a trabajar en el sector turístico, que se extiende desde el núcleo de Puebla de Lillo hasta la Estación de Esquí de San Isidro. El crecimiento de este sector económico está contribuyendo a fijar población.