El Clima
Inviernos largos y fríos, veranos cortos y calurosos y otoños y primaveras cortos, pero muy agradables y recomendados para contemplar en todo su esplendor la variedad de contrastes y de colores del paisaje del municipio de Puebla de Lillo. El clima es continental moderado.
El rigor del invierno y de las bajas temperaturas se ha ido moderando con el paso de los años y, sobre todo, debido a los avances tecnológicos que convierten hoy en día a la mayoría de los edificios del municipio en viviendas confortables y acogedoras. La nieve no es ninguna amenaza en Puebla de Lillo sino todo lo contrario. La nieve significa una buena campaña de esquí, llegada de deportistas y de turistas y el auge de la temporada de invierno de turismo. Varias máquinas y brigadas de especialistas se turnan durante todo el invierno para dejar expedita y libre la carretera que une Puebla de Lillo con la Estación de Esquí y ésta con el Principado de Asturias. Lo mismo sucede con la carretera que baja hasta Boñar y a la capital leonesa.
La cercanía del pantano del Porma ha suavizado el extremo de las temperaturas en toda la zona. En verano, las aguas del río y del pantano ofrecen un alivio al viajero por medio de playas fluviales y piscinas.
Las estaciones intermedias, primavera y otoño, son muy cortas, apenas de unas semanas en el mejor de los casos. Son dos momentos excepcionales para visitar la comarca. En el otoño, el paisaje es espectacular con una amplia variedad de tonos de colores, que van desde el verde intenso hasta el amarillo chillón pasando por toda una escala de ocres. La primavera es el resurgir del verde intenso en prados y laderas de montaña, en contraste con las últimas nieves de las cumbres. Impresionante.